Los Ángeles y Los Demonios También en Huelga

Por lucy liu

La huelga de guionistas que asola Hollywood no hace excepciones y el que más o el que menos se ve tocado por su varita. Claro ejemplo le tenemos en las series que nos llegan del otro lado del charco, y para no ser menos en las películas que estaban previstas comenzara el rodaje en breve, como el musical Nine (Rob Marshall) en el que veremos juntos otra vez a Penélope Cruz y Javier Bardem y del que parece se ha descolgado Catherine Zeta Jones por ofrecerla un papel no apto a sus ansias de protagonismo.

Otro ejemplo es la próxima película de Ron Howard, de la que últimamente se venía hablando, sus Ángeles y Demonios. La fórmula que utilizó en El Código Da Vinci le dio resultado, así que al poco tiempo se le pidió a Akiva Goldsman, guionista que adaptó El código da Vinci que hiciera lo propio con Ángeles y Demonios. Otro best seller del mismo autor, Dan Drown. Aunque se habla de secuela, hay que recordar que Ángeles y Demonios es anterior en el tiempo al Código da Vinci, aunque comparte al mismo protagonista, Robert Langdom, experto en iconografía.

En esta entrega veremos a Langdom correr por las calles del Vaticano, con el tiempo en su contra, para poder detener los planes que tienen entre manos la secta de los Illuminati, acompañado por una científica italiana, Vittoria Vetra.
Como en la primera entrega, el encargado de dar vida al investigador será Tom Hanks, el que ya se embolsara una golosa cifra por el Código da Vinci y que por Ángeles y Demonios la cifra se ha convertido en lo más sustancial.

Sobre quién será su partenaire en dar vida a Vittoria Vetra, se ha rumoreado mucho al respecto. En un principio se oyeron campanas que apuntaban a que la modelo Giselle Bundchen sería la encargada, aunque poco duraron y la torre cayó. Ahora las flechas intentan hacer diana en Naomi Watts.

Yo por el momento no cantaría victoria, pues si en un principio se esperaba que la película estuviera terminada para finales del próximo año con su consiguiente estreno en las salas, ahora con la paralización de los retoques del guión, la fecha que se baraja es primavera de 2009, en fin, que puede llover y escampar mil veces hasta que salga el sol.