Hoy llega a nuestras pantallas la primera aventura cinematográfica de los Simpsons (salvando aquel corto que aparecía al comienzo de La Jungla 2).
Esto de estrenar películas antes del viernes, se está empezando a volver recurrente. Como ya comenté en una ocasión y por si a alguien le interesa, es debido a que el recuento oficial de taquilla se hace todos los Lunes. Al estrenar una película habréis visto en alguna ocasión la famosa frase de "Tropecientos millones de euros en su primer fin de semana". Pues bien, ahora sólo es cuestión de unir los puntos: Si en vez de estrenar un viernes, estreno uno, dos (Harry Potter) o incluso tres (Transformers) días antes, mi película estará en cartel más tiempo y o rlo tanto la recaudación ese lunes será mayor. No se como nadie lo había pensado antes. Parece una idea del mismísimo Homer Simpson.
La historia comienza con Homer, su nueva mascota, un cerdo, y un silo lleno de excrementos que tiene una fuga – una combinación que desencadena un desastre distinto a todo lo que Springfield haya experimentado jamás. Mientras Marge está indignada por la monumental metedura de pata de Homer, una turba vengativa cae sobre el hogar de los Simpson. La familia se escapa por los pelos pero no tarda en quedar dividida por el conflicto.
A la ciudadanía de Springfield le sobran motivos para pedir la cabeza de Simpson. La calamidad provocada por Homer ha llamado la atención del presidente de los EE.UU. Arnold Schwarzenegger y del jefe de la Agencia de Protección Medioambiental, Russ Cargill.
Mientras el destino de Springfield y el del mundo permanecen indecisos, Homer emprende una odisea personal de redención – buscando el perdón de Marge, la reunión de su dividida familia y la salvación de la ciudad donde vive.
Puede parecer mentira, pero no soy fan de Los Simpsons. Reconozco que al principio me gustaban e incluso divertían, aunque no más que Futurama. El tiempo ha ido haciendo su trabajo y ahora ya no aguanto un episodio completo. Los he cambiado por Padre de Familia (del que me aburriré con el tiempo también). Para mi han perdido la frescura y la acidez de sus inicios, aunque aún veo algún destello de aquello que me atrajo de ellos. En el trailer de la película he visto visos de aquella irreverencia políticamente incorrecta que me hizo seguirlos con bastante atención.
Veremos que pasa...
Esto de estrenar películas antes del viernes, se está empezando a volver recurrente. Como ya comenté en una ocasión y por si a alguien le interesa, es debido a que el recuento oficial de taquilla se hace todos los Lunes. Al estrenar una película habréis visto en alguna ocasión la famosa frase de "Tropecientos millones de euros en su primer fin de semana". Pues bien, ahora sólo es cuestión de unir los puntos: Si en vez de estrenar un viernes, estreno uno, dos (Harry Potter) o incluso tres (Transformers) días antes, mi película estará en cartel más tiempo y o rlo tanto la recaudación ese lunes será mayor. No se como nadie lo había pensado antes. Parece una idea del mismísimo Homer Simpson.
La historia comienza con Homer, su nueva mascota, un cerdo, y un silo lleno de excrementos que tiene una fuga – una combinación que desencadena un desastre distinto a todo lo que Springfield haya experimentado jamás. Mientras Marge está indignada por la monumental metedura de pata de Homer, una turba vengativa cae sobre el hogar de los Simpson. La familia se escapa por los pelos pero no tarda en quedar dividida por el conflicto.
A la ciudadanía de Springfield le sobran motivos para pedir la cabeza de Simpson. La calamidad provocada por Homer ha llamado la atención del presidente de los EE.UU. Arnold Schwarzenegger y del jefe de la Agencia de Protección Medioambiental, Russ Cargill.
Mientras el destino de Springfield y el del mundo permanecen indecisos, Homer emprende una odisea personal de redención – buscando el perdón de Marge, la reunión de su dividida familia y la salvación de la ciudad donde vive.
Puede parecer mentira, pero no soy fan de Los Simpsons. Reconozco que al principio me gustaban e incluso divertían, aunque no más que Futurama. El tiempo ha ido haciendo su trabajo y ahora ya no aguanto un episodio completo. Los he cambiado por Padre de Familia (del que me aburriré con el tiempo también). Para mi han perdido la frescura y la acidez de sus inicios, aunque aún veo algún destello de aquello que me atrajo de ellos. En el trailer de la película he visto visos de aquella irreverencia políticamente incorrecta que me hizo seguirlos con bastante atención.
Veremos que pasa...
3 chismorreos:
Nos leemos.
En fin, manías mías
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